La luz del sol, el olor a hierba recién cortada, el calor… Y las personas, como las flores, volvemos a la vida verano tras verano. Aumenta la energía sexual, el entusiasmo y el optimismo. Hacemos planes, soñamos despiertos… y es que… como el día es más largo la libido crece con fuerza.
Es ahora cuando nos entran las prisas por cuidarnos y adelgazar unos kilos o tapar imperfecciones pero, hacerme caso, estamos tan cegados por nuestras hormonas que a nadie debería importarle eso. La confianza en uno mismo es la mejor arma de seducción.
Así que, olvida tus temores y complejos y disponte a pasar uno de los mejores veranos de tu vida, ya sea a solas o en compañía.
Flirtea descaradamente, incluso si tienes una relación a largo plazo. El coqueteo es ser feliz contigo misma y entusiasta con los demás; no es solo seducción, es una forma de añadir energía y diversión al día. Sonríe y saluda a quien te cruces por la calle, párate con un perro, hazle carantoñas a un bebé, usa la ropa que te hace sentir especial… Entonces estarás preparada para recibir los cumplidos que te harán.

Aprende sobre sexo. Dedica tiempo a explorar tu cuerpo y el de tu pareja, lee, prueba nuevas posiciones, piensa en sexo, investiga… y decídete a innovar.

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1 comentario:
muy bueno
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